A muchos nos gusta ver o leer las novelas, pero pocos se dan cuenta de que están viviendo una. La vida no es siempre como en las películas de Disney, con “Los finales felices, mejores amigos para siempre, castillos bonitos, relaciones y familias perfectas…”. La vida es una novela vivida todos los días, muchas de las escenas son similares a las que se aprecia en los libros o en la televisión.
Los pleitos, la hipocresía, el amor momentario o premioso, la mal gracia, el interés, traición, entre otras, son escenas reales vividas por nosotros mismo o por otras personas proyectadas en los medios.
Podemos retomar las escenas leídas o vistas para mejorarnos, evitar cometer los mismos errores que cometen los personajes en las novelas, solo tenemos que analizar a profundo las escenas y no solamente sentirse entretenido por ellas, sino aprender de ellas también.
Si aplicamos esa estrategia evitaríamos muchos errores y momentos infelices.