Nuestra existencia es compleja, la vida es compleja, aunque cada persona ha tratado de dar respuesta a algunas cosas, justificaciones que so...

La razón desde una perspectiva distinta


Nuestra existencia es compleja, la vida es compleja, aunque cada persona ha tratado de dar respuesta a algunas cosas, justificaciones que son aceptadas por muchos, mientras son cuestionadas por otros; pero eso es parte de este proceso, la cual llamamos vivir.

Hay un sin número de ejemplos y situaciones en la cual cada adversario justifica su punto de vista con argumentos claros y muchas veces creíbles, un gran ejemplo de ella son los asuntos políticos y religiosos.

En la política, cada posición consideran que son mejor que el otro, o que su forma de gobernar y de hacer las cosas será lo mejor para todos; la izquierda contradice a la derecha y así sucesivamente, mientras los simpatizantes de cada postura defienden su ideología con conceptos, datos históricos y todo lo necesario para poder obtener la razón. A pesar de esto, hay gente que son imparciales y que cambian de parecer rápidamente, es decir, no siempre aceptan lo mismo, pero igual siempre existe cierta cantidad de personas que no cambian de parecer mucho menos de postura, son fieles a su postura, devotos y hasta cierto punto esclavizados a ella, aunque no se dan cuenta, pero es su criterio y parecer; y obviamente hay que respetarla.

En la religión, las personas siguen ciertos patrones o creencias que derivan de lo divino, la cual posee diversos reglamentos o leyes que son la clave para vivir bien, feliz, entre otras cosas buenas y próspero. El cristianismo –que forma parte de la religión- por ejemplo, niega muchas cosas que la sociedad contemporánea ejerce o en su mayoría acepta, un gran ejemplo de esto y lo más controversial para dicha agrupación es el aborto y la homosexualidad; en donde dan argumentos que niegan todo lo mencionado, igual con escritos y bases concretas. A pesar de todo eso, hay muchas personas quienes no siguen o aceptan esos patrones, pues su concepto de vida, principalmente en el aspecto personal, es otra; aunque, por otra parte, hay muchos que son creyentes y devotos de lo divino, solo que no siguen la doctrina tradicional, pero para ellos está bien y viven bien con eso. Lo curioso es que entre las mismas denominaciones cristianas o religiosas siempre han existido contradicciones por parte de sus líderes y seguidores; igual con argumentos y justificaciones lógicas; esto pueda dar explicación a los centenares de religiones que existen en el mundo.

Tanto la política como la religión provocan conflictos y son temas de discusión en todas partes del mundo, e igual si se trata de asuntos meramente sociales, son peores.

El ser humano es complejo, cambia de opiniones y cada uno es distinto. El problema surge cuando uno quiere imponer su ideología o pensar en los demás, ahí las cosas cambian, ahí nace el problema, porque muchos quieren moldear a las personas para ser y pensar iguales a ellos, que crean y miren el mundo a su manera, y no debería de ser así.

Como seres humanos lo importante es siempre respetar la diversidad en todas sus dimensiones y tratar de generar un ambiente y una sociedad igualitaria en donde todos puedan gozar de los mismos derechos y beneficios; vivir libre, bien y en paz. No hay que olvidar la bendita tolerancia.

En la política las cosas deben ser rotativo, cambiante, hay que darle un sabor distinto a las cosas de vez en cuando, pero siempre velando por el desarrollo y el bien de las personas. Es igual con la religión, no hay que andar señalando ni juzgando a la gente por no hacer o creer en lo mismo que tú, porque el parecer de cada quien es distinto, ellos piensan que tienen la razón y tú también. La educación influye mucho en estos procesos y en nuestra reacción ante lo adverso, lo que no va con nosotros.

Un ser educado ignora y busca generar cambios, hacer todo bien, sin crear más problemas y contradicciones; Sus acciones hablan por sí sola. El único mal que existe es la que va en contra de los derechos de los demás, y a pesar de que cada quien interpreta las cosas a su manera, es necesario la reflexión y la meditación sobre un determinado asunto; porque no hay que explotar o dejarse llevar por el mismo canto, porque todo puede cambiar, la misma naturaleza nos ha enseñado eso.

Al fin y al cabo, cada persona defiende lo suyo, sus ideologías, creencias, y no está mal, lo único mal está en pensar que las personas por ser y ver el mundo, diferente que nosotros están mal o merecen lo peor, porque así lo ha demostrado y expresado muchos.

Todos tenemos la razón, pero muchas veces el problema es que no en el momento ni en el lugar donde estemos, pero si la tenemos, porque la razón va en lo que creemos, en lo que hacemos y sembramos, aunque claro, no hay que confundir una cosa con la otra, al final este texto hace referencia a la razón en cuento a la política o la religión, ya lo otro es más complejo y diferente.